El 26 de marzo de 2025, el proyecto de infraestructura descentralizada Hoodi anunció la finalización exitosa de las pruebas finales de su nuevo sistema: Pectra. Aunque ese nombre aún puede sonar desconocido para muchos, esta actualización podría ser clave para dar forma a la próxima etapa del ecosistema cripto.
Pectra está diseñada como una extensión de la hoja de ruta de Proto-Danksharding de Ethereum, con el objetivo de mejorar la eficiencia, escalabilidad y sostenibilidad de la red. En términos simples, es un paso hacia la construcción de un entorno blockchain más rápido, más barato y más fácil de usar.
Este hito marca la consolidación de Hoodi como un actor serio dentro del ecosistema Ethereum. Hasta hace poco, conceptos como “capa 2” o “soluciones de escalado” eran términos reservados para desarrolladores o técnicos del sector. Pero a partir de ahora, es probable que estas tecnologías empiecen a impactar directamente en la experiencia del usuario promedio.
Para quienes están cansados de comisiones (gas fees) elevadas o tiempos de espera largos en transacciones, innovaciones como Pectra ofrecen una promesa real. A medida que avanzan proyectos de infraestructura como Hoodi, actividades como el intercambio de NFTs o el uso de DeFi podrían volverse más rápidas, fluidas y accesibles para el público general.
Si bien el impacto inmediato en el mercado aún puede parecer limitado, este avance deja en claro algo importante:
Ethereum sigue evolucionando — y no ha perdido impulso.
Si realmente quiere consolidarse como infraestructura global, serán avances como este técnicos, constantes y sólidos, los que lo llevarán hasta allí.